OFICIAL: Este será el dorsal de Griezmann en el FC Barcelona

El dorsal de Antoine Griezmann era una de las grandes incógnitas de su fichaje. En el Atlético de Madrid, llevaba el ‘7’ en el Wanda Metropolitano, pero en el Camp Nou, a día de hoy, sigue siendo propiedad de Philippe Coutinho

Antoine Griezmann se convirtió en el elegido del FC Barcelona para reforzar la delantera. El delantero francés abandonó el Atlético de Madrid tras el pago de su cláusula de rescisión y este domingo fue presentado oficialmente como nuevo miembro de la plantilla culé. Durante el evento, fue desvelada una de las grándes incógnitas sobre su llegada: su dorsal.

Como futbolista ‘colchonero’, llevaba el ‘7’ y varias informaciones apuntaban que quería conservar dicho dorsal en el FC Barcelona. No obstante, en Can Barça el ‘7’ es propiedad de Philippe Coutinho que, pese a que podría acabar marchándose, todavía tiene derecho sobre el número que eligió el verano pasado.

Curiosamente, cuando Coutinho llegó procedente del Liverpool, se le asignó el ’14’ pese a que el ‘7’ estaba libre. En el Barça decidieron ‘guardarle’ el número a Griezmann, que finalmente no quiso venir. Un año después, el ‘7’ es del brasileño y Griezmann no lo lucirá a no ser que su nuevo compañero deje de serlo.

Por tanto, Griezmann lucirá el dorsal ’17’, sumando una decena al ‘7’ que siempre lució en Real Sociedad y Atlético. Anteriormente, en el FC Barcelona, lo llevaron Alcácer, Munir, Song, Pedro, Gio Dos Santos, Van Bommel, Mendieta, Christanval, Petit, Bogarde y Amunike. Ahora, la nueva estrella culé lo heredará.

Y es que Griezmann era el elegido del FC Barcelona. Lo era desde el año pasado, cuando el club azulgrana quiso ficharle pagando su cláusula (que en ese momento era de 100 millones de euros) pero se encontró con el desplante del jugador. Esta vez, el francés no ha querido dejar escapar otra oportunidad y ha fichado por los culés, que tienen fe ciega en él.

Por su rendimiento con el Atlético de Madrid y con la selección de Francia, Griezmann se ha ganado a pulso el hecho de que en Can Barça estuviesen obsesionados con su llegada. Su enorme talento, su capacidad de asociación y, sobre todo, su olfato goleador pese a no ser un delantero centro nato han hecho que se le viese como imprescindible en el Camp Nou.