Los servicios médicos del Barça se vuelcan con Dembélé
Ousmane está muy tocado porque ya había hecho el cambio de chip ordenando su vida personal
El jugador se sometió durante el día de ayer a varias pruebas en diversos centros hospitalarios
Cae, luchando por un balón alto y dividido, con el pie izquierdo. Con la bota impacta ligeramente con Guerreiro, pero el futbolista del Dortmund se levanta sin problemas. En cambio, Dembélé pivota sobre su pierna izquierda hasta que se echa al suelo. Acto seguido se quita las botas y muestra al árbitro, que se le acerca, un rostro que combina rabia, resignación y desesperación. “Yo ya no sé qué hacer”, parece decir.
El extremo se marcha cabizbajo y, sin poder ocultar las lágrimas, enfila el túnel de vestuarios. Primer comunicado del club: “El jugador del primer equipo O. Dembélé tiene una lesión muscular en el muslo derecho. Pendiente de pruebas para saber el alcance exacto de la lesión”. El segundo comunicado médico debía ofrecerse durante el día de ayer, una vez sometieran al jugador a más pruebas. Pero no llegó.
Muy tocado
Ousmane estaba ayer hundido. Leo Messi se le acercó para saber cómo se encontraba, para mostrarse su apoyo. Se encontró a un futbolista muy frustrado. La misma sensación mostró durante el día de ayer, cuando se puso en manos de los servicios médicos del Barça para analizar qué había sucedido.
Horas después, y tras serle complicado conciliar el sueño, la cara de Dembélé seguía siendo un poema y expresaba claramente cuáles eran sus sentimientos: llegó al Barça sin haber tenido lesiones graves en el Dortmund, quizá por ello sin saber qué vida debe llevar un futbolista profesional del más alto nivel.
Una vez en el Camp Nou, y tras una serie de episodios que acabaron con la paciencia de muchas de las personas que le rodeaban, entendió que debía dar un vuelco a su vida. Así fue y en ello está. Ha puesto orden a su vida. Parece haber entendido que el único camino para triunfar en el Barça y tener una carrera larga y llena de éxitos era ordenar su vida. Lo asumió y, de hecho, hace tiempo que no se le conoce alguna falta de disciplina como las que había protagonizado anteriormente.
El delantero, además, asumió ayer como un gran premio ser titular, por encima de Griezmann, en un partido tan importante. Se subió al último tren que le había reservado el Barça, consciente de que tiene entre sus manos a un talento superior al que había que domesticar. Hasta que cayó mal sobre el césped.
Maratón de pruebas
Ayer no hubo comunicado médico por parte del Barça y hablando sobre el estado físico de Dembélé. La razón es la extrema preocupación con la que el club ha encajado este nuevo golpe al físico del futbolista. Existe mucha preocupación por la fragilidad muscular del galo, que ayer se vio obligado a visitar varios centros hospitalarios para someterse a todo tipo de pruebas y análisis para conocer, exactamente, qué está pasando.
Los servicios médicos del Barça empezaron a remover ayer cielo y tierra y no van a escatimar esfuerzos para recuperar a Dembélé, tanto anímica como físicamente. Creen estar en el buen camino porque el jugador está poniéndolo todo de su parte, pero la lesión del miércoles fue un golpe para todos, también para quienes están gestionando el cambio de rumbo del futbolista.
Salvando las distancias, algo parecido le ocurrió durante sus inicios a Leo Messi, que dio un giro de 180 grados a su vida personal y profesional.
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